A nuestros usuarios de Zoom en todas partes del mundo:
tanto si es una compañía internacional que necesita mantener su actividad empresarial, un organismo gubernamental local que trabaja para que su comunidad siga funcionando, un docente que enseña a sus alumnos de forma remota o un amigo que quiere quedar para pasar un buen rato durante el distanciamiento social, todos están experimentando los retos de esta crisis sanitaria internacional. Durante este periodo de aislamiento, en Zoom nos sentimos increíblemente privilegiados de poder ayudaros a seguir conectados.
También nos sentimos enormemente responsables. El uso de Zoom se ha disparado de la noche a la mañana, y ha superado con creces nuestras expectativas cuando anunciamos nuestro deseo de ayudar a finales de febrero. Entre nuestros usuarios se encuentran 90 000 escuelas de 20 países que nos han elegido como plataforma para ayudar a los niños a continuar con su educación de forma remota. Para poner en contexto este crecimiento, a finales de diciembre del año pasado, el número máximo diario de participantes en reuniones, gratuitas y de pago, realizadas en Zoom era de aproximadamente 10 millones. En marzo de este año, llegamos a más de 200 millones diarios de participantes en reuniones, tanto gratuitas como de pago. Hemos estado trabajando día y noche para garantizar que todos nuestros usuarios, nuevos y antiguos, grandes y pequeños, puedan estar en contacto y seguir operativos.
Durante las últimas semanas, dar soporte a esta afluencia de usuarios ha sido una tarea titánica y nuestro único objetivo. Nos hemos esforzado por ofrecer un servicio ininterrumpido y la misma experiencia intuitiva que ha hecho de Zoom la plataforma de videoconferencia preferida de empresas de todo el mundo, mientras garantizamos también la seguridad y la privacidad de la plataforma. Sin embargo, reconocemos que no hemos estado a la altura de las expectativas de privacidad y seguridad de la comunidad (y las nuestras propias). Lamento profundamente esta situación y quiero comunicarles lo que estamos haciendo al respecto.
Primero, un poco de contexto: nuestra plataforma se creó fundamentalmente para clientes de empresa, es decir, instituciones grandes con soporte informático integral. Entre ellas se encuentran desde las empresas de servicios financieros más grandes del mundo hasta proveedores líderes de servicios de telecomunicaciones, organismos gubernamentales, universidades, organismos de atención médica y consultas de telemedicina. Miles de empresas de todo el mundo han realizado exhaustivas revisiones de seguridad de nuestras capas de usuario, red y centro de datos y han seleccionado con confianza a Zoom para su implantación completa.
Sin embargo, no diseñamos el producto con la perspectiva de que, en cuestión de semanas y de repente, todas las personas del mundo estarían trabajando, estudiando y socializando desde casa. Ahora contamos con una cantidad de usuarios mucho mayor, que están utilizando nuestro producto de maneras innumerables e inesperadas, y nos enfrentamos a retos que no habíamos previsto al diseñar la plataforma.
Estos nuevos ejemplos de uso, en su mayor parte del público general, nos han ayudado a descubrir errores imprevistos en nuestra plataforma. Un equipo de periodistas especializados e investigadores en materia de seguridad también nos han ayudado a identificar fallos preexistentes. Agradecemos las observaciones y las preguntas que hemos estado recibiendo sobre cómo funciona el servicio, sobre nuestra infraestructura y capacidad, y sobre nuestras políticas de privacidad y seguridad. Estas son las preguntas que mejorarán Zoom, tanto como empresa como para todos sus usuarios.
Nos las tomamos muy en serio. Las examinamos todas y las respondemos a la mayor brevedad posible. Estamos comprometidos a aprender de ellas y mejorar en el futuro.
Pero antes de exponer cómo pretendemos mejorar, quiero compartir lo que hemos hecho hasta ahora.