Piense en la experiencia de asistir a un evento deportivo en directo.
Miles de personas asistirán al evento en directo, pero millones lo verán por televisión y vivirán una experiencia muy diferente pero igualmente agradable (¡probablemente más si su equipo gana!). La experiencia televisiva está diseñada, planificada y producida con contenidos atractivos, comentarios informativos, diseño de sonido (para escuchar a los árbitros o a los jugadores) y otras ofertas que no están disponibles para los asistentes en persona.
Ahora, piense en la última vez que vivió un evento virtual. Lo más probable es que el evento en directo haya tenido un mayor impacto en usted. Esto se debe a que los seres humanos son criaturas sociales que anhelan la interacción y el contacto con otras personas.
Al igual que los programas de televisión incluyen una audiencia en el estudio en directo, los eventos en directo proporcionan el contenido necesario para aumentar el interés de la audiencia remota. Si a esto le añadimos los avances en la tecnología de la comunicación de los últimos dos años, tenemos todas las herramientas necesarias para crear experiencias virtuales memorables de alcance mundial.
Los eventos híbridos se están convirtiendo en una estrategia eficaz y rentable porque combinan la cercanía y el atractivo de los eventos en directo con la interactividad, la flexibilidad y el alcance global de los eventos virtuales. Este prometedor enfoque combina dos poderosas experiencias que pueden complementarse entre sí.